SIN TITULO 2
Hacia dónde apunta tu mirada,
qué paisajes y que figuras sueltas adornan tu cabeza,
cuántas palabras se enredan en tus manos,
hacia dónde nos conducen tus pasos
que han pisado tantas tierras,
cuál es tu abrigo en las largas y pesadas
noches del invierno.
Dime
navegante de este mar profundo de la vida
qué senderos iluminas con tu lámpara de aceite otoñal,
en qué navío atraviesas la oscura noche,
cómo revelas los sueños
y te apoderas de la luz del nuevo día,
en qué lugar anidan tus recuerdos nefastos y eternos,
en qué muelle atravesado por el crepúsculo
anclan tus pequeños versos,
dime, triste poeta,
en qué se convertirán estas cortas palabras
cuando tus ojos se cierren
y tu mirada no apunte más
hacia ningún lugar de esta tierra.