OLGA WALKIRIA SÁNCHEZ

Cuenta la mitología Germana que las Walkirias eran ninfas mensajeras de Odín encargadas de llevar a los guerreros valientes al Valhala, el paraíso de los héroes, cuando morían en batalla. Allí los hacían felices durante toda la eternidad. Escuchando la voz de Olga Walkiria Sánchez y dejándose encantar por sus ojos que dejan ver su sensibilidad y ternura, pareciera que Odín dejó enredada en el Tolima a una de esas ninfas.

Sus primeros sueños, armonizados por la voz y guitarra de su padre, el compositor José Faxir Sánchez, crecieron bajo el sol ardiente de Planadas, el pueblo que la viera nacer. Al caer el día, José Faxir la llevaba hacia algún lugar de la casa para cantarle sus canciones. Seria él quien marcaría su vida de manera indeleble.

Cuando apenas contaba con cinco años, su padre le regala un libro lleno de imágenes: 20 poemas de amor y una canción desesperada, de Pablo Neruda. Sobre sus páginas aprendería a reconocer y escribir las primeras letras en un libro que conserva como recuerdo de esos días.

Su primera aparición en público fue a los 6 años. Con un vestido lleno de mariposas y flores, diseñado por José Faxir, y cantando una ranchera, su gran influencia. Olga Walkiria se dejó encantar por las luces, los aplausos las canciones de Pedro Vargas y Alfredo Sadel.

Cursó los estudios secundarios en el colegio departamental de Planadas. Desde allí suplió la aparente pasividad de su pueblo con una actividad cultural agobiante. Vocalista del grupo Aires del sur, un conjunto folclórico típico que interpretaba los sanjuaneros de su padre y con el cual represento al Tolima en los Juegos Nacionales Cafeteros, integrante de la banda de guerra, directora del coro de la iglesia y participante en centros literarios, sin duda alguna los años de juventud marcaron el entusiasmo con que Olga Walkiria emprendería su trabajo en años posteriores, cuando viajó a Bogotá a iniciar estudios en comunicación social y periodismo en la universidad Externado de Colombia, su otra pasión desde cuando escribiera poemas y redactara artículos en la revista de su colegio.

Bogotá abrió una ventana de sensaciones a su alma. Los cafés de La Candelaria, las obras de teatro, los conciertos, el cine y la literatura, conformaron un mundo que desde su pueblo había soñado. De aquí en adelante todo fue nuevo y sorprendente. Descubrir la gran ciudad le daría una nueva actitud ante la vida, más universal, más cosmopolita.

Durante dos años trabaja en Radio Melodía en el programa disfrute la tarde. Allí comenzó su trabajo radial que continuó luego en Radio Santafé en el programa después de las dos.

Todo su trabajo periodístico fue alternado con sus estudios. Se le ve entonces en su labor como cronista, al ser colaboradora de la revista aló, de El Tiempo, El País, de Cali, y la revista Gente, de El Heraldo. Estas felices circunstancias del oficio le ha servido para entrevistar a quienes sólo conocía a través de las grandes pantallas de cine. Herzog, Alonso Arau, Anthony Quinn, Al Pacino, Almodóvar, Emma Tomphson, Geraldine Chaplin y Catherine Deneuve, entre muchos otros, motivos de sus crónicas cálidas y llenas de vida.

Su actividad musical, iniciada desde niña, no ha sido interrumpida. Desde que descubrió los estudios de grabación, ha hecho de ellos su segundo hogar. Allí se escapa del mundo. Fabrica otra realidad entre notas y melodías que la transporta durante horas que jamás le parecen largas.

En 1993 grabó como solista dos temas de su padre en un disco producido por Rápido Tolima: Llegamos tarde y Búscame. Antes había grabado coros de los temas de José Faxir en un disco editado por la Cooperativa de Cafeteros del Sur del Tolima. En 1997 enriquecería con los coros el primer trabajo discográfico de su padre, a nivel individual, llamado Prisionero de ti.

Compositora clandestina, conoce el mismo año al célebre compositor de los setentas, Victor Manuel García, Manuello, con quien inició su trabajo musical de manera profesional al realizar los coros de diversas producciones de centauro y en especial el doblaje al español de películas infantiles que son vistas en América Latina. Series famosas en varios países como Children, Intrépidos Radiodetectives, Taxi-taller, Street Figther, o diversos programas de Discovery Channel, tienen la voz de esta bella Tolimense rodando a través de sus capítulos. Su voz es tan conocida en los países de habla hispana como desconocido en su rostro.

Como integrante del grupo de teatro Adradanza, con el que realiza una gira por el Colón de Bogotá, el Félix de Bedout de Medellín y en diversos teatros del país con la obra Réquiem de Arena, logrando con su voz envolver en arrullo a todos los espectadores.

Periodista cultural, con un disco ya producido de música tropical y en conversaciones con varias disqueras, Olga Walkiria aún no decide entre su profesión y la música. “ No tengo por qué escoger. Ambas son mi vida”, dice con la madurez de una mujer que ha vivido interesantemente cada una de las facetas del arte y cuyas vivencias ha consignado en notas sobre sus viajes por España, Francia ,Argentina, México, Cuba Estados Unidos y Ecuador.

En Mayo de 1999 Olga Walkiria graba su primer disco profesionalmente con FM discos, con dos canciones de su autoría entre las que se destaca Otoño y Primavera, un bello bolero que ocupa los primeros lugares en las emisoras de música popular del País.

En enero del 2000 firma contrato con la tradicional casa disquera Sonolux y publica su primer disco Olga Walkiria, con siete temas de su autoría llenos de poesía y romanticismo. Temas como Suave, Valió la pena, Más Allá, permanecieron durante varias semanas en las listas de los más escuchados.

La casa disquera Sony Music internacional se interesa por sus composiciones y su interpretación y publica este trabajo en USA. Las canciones de esta producción son escogidas como banda sonora de la telenovela de RCN Televisión Pobre Pablo.

Durante dos años se dedica al periodismo político en la presentación y reportaría del Noticiero del Senado transmitido en todos los canales del país. También dirige el programa Globomanía musical del canal A .

La doble condición de periodista y cantante le permite dirigir y presentar con gran éxito durante 7 años el programa de Telmex “Las Noches de Walkiria” una hora diaria en vivo, con participación de los televidentes en el que entrevistaba e interactuaba con los artistas invitados. Su forma sencilla y espontanea de presentar y su conocimiento de la música popular llevo el programa a los primeros lugares de sintonía. Como homenaje al espacio grabó, en el año 2007, su segundo larga duración titulado “La Noche de Walkiria”. En este disco la acompañan artistas como Los Patuma, Madera Trìo, el Trío Colombita y Báez. En esta producción mezcla canciones populares latinoamericanas como Dos Gardenias , Amar y Vivir y Estrellita del Sur con temas de su autoría como El Espacio Vacío, Cuando Sean las Doce y Caballero. Gracias a este trabajo discográfico es invitada en el año 2008 a Una gira de conciertos en ciudades como Boston y Orlando en Estados Unidos. También es invitada del Festival de Boleros de la Habana y del festival de Boleros de Compensar. Se presenta en escenarios como la Sala Oriol Rangel y La Gilberto Alzate Avendaño. En el año 2008 recibe de parte de la universidad Santo Tomas un reconocimiento por su labor por la cultura del país. Sus canciones han sido grabadas por artistas como: EL Dueto Lluvia y Rocío (Mi Semilla); Karina (Olvidarte); Jimmy Fernán (El espacio Vacío) ; José Luis Ortiz (Ambición); Báez (Dile , Despecho Forever y Cuando Sean las Doce).

A finales del año 2009 entra a ser parte del grupo mundial de compositores de EMI Publishing y el Popular grupo mexicano Bryndis graba su tema “ Maldita Dignidad”.

También graba al lado del cantante popular Rey Fonseca la canción de su autoría titulada Ya me canse.

En el año 2010 lanza su tercera producción discográfica con temas de su autoría titulada: Déjame el bar, en el que hace énfasis en el generó popular en el cual ya ha sido reconocida como compositora.

Gracias a la música y al periodismo ha tenido la oportunidad de viajar por diferentes países del mundo pero aun tiene pendiente una cita con su poeta mayor en cuyo libro aprendió a leer. La cita planea cumplirla en una casa llena de caracolas, mascarones y escaleras inconclusas en Isla Negra.

Olga Walkiria ha vivido su vida plenamente creyendo siempre en sus sueños y agradecida con el don que Dios le dio de llegar a los corazones de la gente a través de sus letras, sus canciones y sus programas de radio y Televisión.

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