EN LA FERIA

 

Olvidando del sabio la cordura

Dejo el retiro y el vivir austero,

Y entre el humano enjambre bullanguero

Intérnome en la feria con premura.

Contágiame el comercio su locura,

Y no teniendo bienes ni dinero

Ofrezco un corazón puro y sincero

A cambio de un amor todo ternura.

 

Pero vana resulta mi porfía:

Nadie acepta la extraña mercancía;

Y al fin, cansado, con fingida calma,

 

De mi vida retorno a la aspereza,

Llevando en las alforjas mi pobreza

Y mi inútil amor dentro del alma.