MIGUEL CHAMORRO ANDRADE

Componer más de trescientas obras musicales de las cuales hay veintitrés grabadas en diferentes casas disqueras del país y una en Venezuela; organizar fiestas folclóricas en poblaciones como Natagaima, Espinal, Barranquilla, Villavicencio y San Martín (Meta) e impulsar y divulgar exponentes de la música desde sus famosos almacenes de discos Michel y desde el centro artístico Colombia Musical, le dan a Miguel Chamorro Andrade la seguridad de haberse ganado un lugar importante entre los compositores tolimenses del siglo XX.

Ha sido tan prolífico como ignorado. Sus canciones, interpretadas entre otros por Jaime Llano González, Francisco Zapata, la orquesta La Reforma, la banda 20 de Julio, el grupo Atlántico, la Superbanda de Venezuela, Los tres Carlos, Los VTB de Cali, el conjunto Mayasura y los duetos Ortiz y López, Murillo y Mosquera y Galindo y Rodríguez, representan la grandeza de nuestra raza. No importa que sea un bambuco, una cumbia, una balada o un joropo. Su versatilidad y sensibilidad creadora hace honor a toda una vida dedicada a este mundo de acordes y melodías.

La negra Nicolasa, grabada en discos Tropical de Barranquilla; Qué te hice yo, grabada en discos Fonobosa de Bogotá; Me voy de la ciudad, grabada en la suramericana del disco en Venezuela; Cuando no estás conmigo, grabada en Philips de Bogotá; Marthica, grabada en Grabarco de Cali; La paradita y El labriego, en Daro internacional; Tiplecito Triste y Anciano amor, en Sonolux; Se prendió la fiesta, por Pijaos Producciones y El errante, en discos Victoria de Medellín, son quizás sus obras más conocidas.

Nació el 8 de mayo de 1938 en Purificación. Hijo de Zacarías Chamorro y María Antonia Andrade, desde los seis años vive en el Espinal, tierra que lo adoptaría como hijo suyo. Michel, como es conocido entre sus amigos, se inició como cantante aficionado en el conjunto de Vicente Arias y luego en el de Servando Polanía. Más adelante integraría el Coro Polifónico y Rondalla, en la misma ciudad, además de formar parte durante varios años del grupo musical Mayasura.

En octubre de 1987 fue nombrado presidente de la Corporación Folclórica del Tolima y en 1988 se hizo acreedor al Centauro de Oro en Villavicencio con Mi cumbia enloquece. En 1990 su canción Oh Colombia, patria mía, interpretada por la cantante payanesa Martha Fajardo, quien la había defendido en Villavicencio, ocupó el primer lugar en el XV Festival del Bunde, que él mismo ayudara a crear. En 1991 creó el Concurso Nacional de la canción Andina Villa de las Palmas en Purificación, su ciudad natal.

Reconocido en el medio artístico pero desconocido por fuera de éste, Miguel Chamorro Andrade continúa su labor peregrina por los caminos del folclor con la misma devoción con la que inició su rumbo hace tantos años, cuando concibiera Marby, su primera obra, y con la misma entrega con la que ingresó, con tan sólo 14 años, al conjunto de Vicente Arias, su primer maestro.

Vale la pena observar de qué manera Miguel Chamorro, además de un músico cuyo nombre se escribe con mayúsculas y verdadero respeto, no se ha contentado con la sola labor de verter su música que es un amplio y variado repertorio. Por encima de ser en su categoría un representativo exponente de la composición, - algunas de cuyas atractivas piezas siguen escuchándose por medio de tantos destacados maestros, conjuntos, grupos y toda suerte de conjuntos musicales-, está al frente de un activismo cultural que en mucho ha beneficiado la cultura regional y nacional.

Los diversos concursos y eventos mencionados que dan sus frutos gracias a su tenaz y persistente labor de dirigente nato de la música, ofrecen de por sí un significativo resultado que está en mora de ser reconocido como se lo merece.

Como presidente de la Corporación folclórica del Tolima, ganador de destacados premios, integrante de valiosas agrupaciones, autor de tres centenares de canciones, compositor exitoso a pesar de no contar con el debido y justo apoyo que merece un artista de su condición, va conformando Miguel Chamorro, así sea para la historia mientras tienen vía libre sus seductoras obras, un auténtico ejemplo de capacidad creadora, disciplina a toda prueba, talento sin descanso y la seguridad de ser, en medio de una actitud sencilla y tranquila, parte indispensable a la hora de realizar un selecto inventario de la música colombiana en sus diversas facetas.

En el 2008 lanzó su nuevo trabajo Noches de Navidad, grabado con Los Pregoneros del Tolima, conformado por Jairo Alberto Bocanegra, Arturo Londoño, Manuel Erazo, Ángel María Ramírez y el mismo Chamorro.

El CD está compuesta por 16 canciones que van desde el merengue, el porro, la salsa, la cumbia y paseo, hasta un pop rock.

Del trabajo se destaca, entre otros, la participación de la intérprete tolimense María Mercedes Falla,como también de Luz Myriam Ocampo, y las orquestas La Reforma y los VTB de Cali.

El compacto fue grabado en Michel Records y la ingeniera de sonido en la mezcla fue Diana Antonela Bocanegra Martínez.