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Y he manchado este aire con la furia
de mi risa
y he manchado tu piel con la furia de
mis manos
y todo lo mancho con un afán soberbio!
Yo soy! y estoy aquí, desnudo,
abandonado al aire,
mano que conjuga este pan y tu mejilla
mano que exprime impúdica el tácito rubor de tus
cabellos
bandera de piel, de sangre,
de trigales, de saliva,
de guitarras ardientes, de fuego, de
risa ...
Hunde tus manos en mi piel
acércate a mis huesos,
mastícalos
mastica su antiguo casco desatado
y asciende hasta su crin,
hasta su velocidad delirio.
Abro de par en par mis párpados sonoros
y me abandono intacto a la ternura tutelar
de regiones ignotas y de mapas.
-religioso y fecundo-
soñador terso de intensas madrugadas.
Yo soy! Y he venido a mancharlo todo,
a destruirlo todo, para nacer de nuevo!